Bilbao
Es posible que travesar Bilbao a pie no sea una de las mejores experiencias del Camino del Norte, pero aporta un gran sentido al conjunto y es un completo error evitarla tomando el transporte público. La Tendería que forma parte de las siete calles primitivas de Bilbao, lleva hasta la calle de la Ribera que seguiremos a mano izquierda. Allí se emplaza el gran mercado cubierto de La Ribera. Cruzaremos el río Nervión por el Puente de San Antón que sustituyó al puente medieval que durante muchos siglos fue el único vado sobre la ría.
Después del puente, tomaremos la calle Bilbao la Vieja que conecta con la calle San Francisco y salimos por la Plaza Zabalburu. Cogeremos de frente la larguísima calle Autonomía que recorre 1,3 kilómetos. Tras pasar el Centro de Salud Basurto, el itinerario nos llevará zigzagüeando por una senda peatonal hasta llegar al Camino Kobetas donde obtendremos una vista privilegiada de la ciudad.
Barakaldo
Tras un túnel llegamos a la Estrada Bizkorta, junto a la carretera Basurto-Castrexana, retomaremos la marcha para coger el cruce de Las Delicias donde pasaremos por el río Kadagua por el Puente del Diablo. Accederemos entonces a Barakaldo y tomaremos la pista asfaltada que va hacia Santa Águeda. Tras varias curvas, nos adentraremos en la calzada medieval bajo el bosque mixto de Larrazabal. A lo largo del camino nos encontraremos con la Ermita de Santa Águeda donde hay una fuente y un espacio perfecto para hacer la primera parada.
Pasaremos por Sestao y casi sin darnos cuenta, estaremos en Portugalete y estaremos caminando por la desembocadura del río Nervión donde se encuentra el puente colgante que une Portugalete con Getxo y que fue inaugurado el 1893 y que desde 2006 es Patrimonio de la Humanidad. Cubra una distancia de 160 metros de longitud y se encuentra apoyado sobre cuatro torres de 60 metros de altura. Las vistas hacia el interior de la ría y de la desembocadura con el Puerto de Bilbao son impresionantes.
El albergue de Portugalete se encuentra en el número 8 de la calle Casilda Iturrizar pero solamente abre durante los meses de verano por lo que el resto del año es necesario volver a Bilbao a pasar la noche o reservar en alguna pensión de la localidad.
ESPECIAL ATENCIÓN
La subida por el Monte Kobetas hasta Santa Águeda es un tramo que entraña cierta dificultad pues debemos solventar un desnivel de 180 metros en poco más de un kilómetro.
Aunque el trayecto se encuentra muy bien señalizado, ir buscando los postes, flechas y azulejos entre tanta señal urbana obliga a concentrarse más de lo habitual.
Algunos peregrinos deciden tomar el metro y saltarse esta jornada, pero es recomendable hacerla a través del itinerario oficial, ya que todo es Camino y todas las etapas tienen su encanto.