Palas de Rei
Tomamos la avenida de Compostela, que desemboca en la N-547, para dejar atrás Palas de Rei. Tras cruzar el río Roxán llegamos a San Sebastián de Carballal. Continuamos nuestra ruta hasta un camino rodeado de eucaliptos y robles para pasar por Lacua y San Xulián do Camiño.
Después de dejar un camino que suele estar lleno de barro tomamos una pista asfaltada y continuamos caminando hasta llegar a Pallota, Pontecampaña y Casanova.
En Casanova encontramos un albergue público y otro privado. Poco después de pasar el desvío que indica la situación del albergue privado debemos dejar la pista asfaltada y tomamos el camino de la izquierda y avanzamos hasta Porto de Bois y Campanilla.
Gracias a una carretera secundaria llegamos a la provincia de A Coruña, muy cerca ya de nuestro destino final. Ya en esta provincia cruzamos por O Coto, Leboreiro, Disicabo, el Parque Empresarial de Melide y llegar a San Xoán de Furelos tras cruzar el río Furelos y finalmente a Melide.
Melide
En esta localidad debemos hacer un alto porque cuenta con numerosos tractivos culturales como el Museo da Terra de Melide, el Convento de Sancti Spiritus, la Capilla de San Antonio o el Edificio del Ayuntamiento, construido en el siglo XVIII.
Tomamos la CP-4603 en dirección a San Martiño y continuamos nuestro camino por Carballal, Raido, Parabispo, Peroxa, Boente, Punta Brea, Figueiroa, Castañeda, Ribadiso da Baixo, con el hospital de peregrinos de San Antón y finalmente llegar a Arzúa.
Arzúa
Antes de disfrutar del merecido descanso debemos visitar en Arzúa la Capilla de la Magdalena, del siglo XIV, y degustar el queso tradicional de esta localidad.
ESPECIAL ATENCIÓN
Esta etapa se caracteriza por tener muchas subidas y bajadas que pueden cansar más de la cuenta al peregrino aunque la etapa no cuente con muchos kilómetros.